Juan Pablo Mañueco Martínez


Guadalajara, te doy mi palabra
[2014]





a Arriaca (Guadalajara) y María (mi mujer).


ARRIACA Y VICTORIA, AMO Y AMARÍA.


Está, esté, estuve, estaré y estaría.
Si partiese de Arriaca, volvería,
porque mi amada eres tú y mi porfía
y mi anhelo y la calma que quería.

Amo, ame, amaba, amaré y amaría
a María, la amada que, entre todas,
vence muy por encima de las modas
sin cuya Victoria mi alma ancla fría.

A ellas, mi luz, mi bien, mi amor, mi vida…
desposo como esposas de mis bodas,
sin las cuales mi ser perecería.

Musas que me inspiraron estas odas.
Seguro al punto las aceptaría
a las dos, por esposas y por brida.

Tales son, para mí, Arriaca y María.



SEGUIDILLAS DE LOS RÍOS Y SIERRAS DE GUADALAJARA
[Fragmento inicial] 

A los poetas, pensadores y pintores que han dicho que en Castilla "no había curvas" ni "regatos ni arboledas", o bien que pintan una tierra yerma, seca y parda e intitulan su parcialísima, tópica y desmoralizadora obra... "Castilla"



¡Para mi sed de amarte
bastan tus aguas,
que alzo por tu estandarte,
Guadalajara!

¡Tajuña, Tajo, Henares,
Jarama en ramas,    
helecho, hierba, boscaje
su agua os derraman!

Hacia el río Ebro alguno
raudo progresa,
por abismos profundos
del Piedra y Mesa.

Sierra de Caldereros
tal cosa tiene,
que divide viajeros
lechos y nieves.

También ríos del norte
aman al Duero,
el Parado da el corte
y el Aguisejo.

En la Sierra de Pela
mana el atajo
que al Duero interpela,
tal como al Tajo.

Pero los cursos grandes,
propios de Alcarria,
a su acuático padre
Tajo lo llaman.

Saetas que hacia ocaso
vuelan hermanas,
Tajuña, Henares, Tajo,
más el Jarama.

¡Tajuña, Tajo, Henares,
Jarama en ramas,
helecho, hierba, boscaje
su agua os derraman!

Sois los racimos de uvas
de mosto verde,
pues florestas en cubas
su hierba os vierten.



I. RÍO TAJO, ESMERALDA ENTRE LAS CUMBRES


Tajo, río esmeralda,
que el bosque entero
envuelve y viste de agua.
Floral sendero.

Verde aflora el entorno
y verde el agua,
gema agreste de adorno
que al mar va rauda.

Senos verdes tus bosques
verde seno, agua.
Rocas con verdes toques,
quietas estatuas.

Sienten cómo se quedan
hierbas de cárcava,
pulcra agua las clarea
y al mar se marcha.

Húmeda tierra en llanto
tus gotas verdes
de roca -en pos de océanos-
bajan paredes.

Vereda honda con hoces
que tajan valles,
rocosos murallones
semejan calles.

Cantiles, farallones,
que habita nadie,
a tus aguas veloces
han hecho Parque.

Puente del Martinete
salva angosturas
de estrecho Peralejos,
el de las Truchas.

Riscales de negrura
-pero horadados-.
Sólo luz no es oscura
por los forados.

¡Dios, qué sol tan grandioso!
¡La escarpadura
alumbra el luminoso
astro en la altura!

(...)



ESPADA DE AMOR*
[Fragmento inicial]


(Álvar Fáñez y la Noche de San Juan de 1085)
 

La dama es Guadalajara
y Álvar Fáñez la rodea.
Bajo murallas pasea,
cubierta lleva la cara.

La noche es noche cerrada,
la bella dama él desea
por si ha de librar pelea
porta al rostro la celada.

Es una noche estrellada
que en el cielo parpadea
y media luna que ondea
sobre el cielo y torreada.

A caballo ha hecho entrada,
junto a torre que bordea,
Minaya, que tintinea
en su mano recia espada.

Está la luna admirada
de cómo el casco golpea
del caballo, y alardea
en verde campiña hollada.

Es Álvar Fáñez Minaya
el que su corcel arrea,
el que las murallas vea
armado para batalla.

¿La noche? La de San Juan,
año mil ochenta y cinco.
El caballo ha dado un brinco
volviendo a Álvar más galán.

Un penacho en lambrequines,
que son las cintas de adorno,
le rodean todo en torno;
a la armadura, son crines.

Caballo está y caballero
trazando al pie sus cabriolas
y Guadalajara a solas
ve que luce otro lucero.

Guadalajara, aún mora,
media luna en su sombrero,
ve jinete tan ligero
que los ojos abre ahora.

(...)

* Poema en redondillas sobre la reconquista de Guadalajara, la noche de San Juan de 1085, por Álvar Fáñez de Minaya, primo de Rodrigo Díaz de Vivar, a las órdenes de Alfonso VI de Castilla.





AL FUERTE DE SAN FRANCISCO, CONVENTO, EN NOVIEMBRE*
(Liras en espejo)


No tanto es bravo el Fuerte
de San Francisco como el de Asís santo,
pues más a fe convierte
-y su tronar en canto-
Fuerte alzado claustro, ajeno a espanto.

Emboscado en sonoro
soto frondoso, sólo esa batalla
campal -que busca el oro
de otoño cuando estalla-
cuanta urda cenobio es, tras su muralla.

Trenza la torre blanca
gótica silueta esbelta hacia oeste,
que en suave otero arranca.
Convento en loma acueste
su cuadrado, asomado a azul celeste.

Cuerpo gigante escoge
nave inversa: alta quilla, nervios cruza
cual remos que recoge
la fe en fieles, y aguza
remada ola hacia el ara que entrecruza.

Bajo ábside, la cripta
ducal del Infantado -ocho pilares
y cúpula que encripta
urnas rumbo a otros mares
bogando sobre mármol rosa-, hallares.

Sal luego fuera, andante,
y sigue tu camino peregrino,
que en el Fuerte, un instante,
de San Francisco, opino,
viste, dulce de arte y triste en destino.

            * * * * *

Curva amplia en remolino
tiende senda lenta zigzagueante,
como un viento opalino
blanco, azul, verdeante.
Tal la vuelta y el sino, vida y viajante.

Si atrás quedó la cripta
y las urnas sin aliento que mirares,
también llevas inscripta
dura huella que en ti hallares:
mes a mes, senda a senda, mar a mares.

Cóncava escaramuza
cada curva de senda y vida acoge,
que la fortuna azuza
en quienes rumbo escoge,
fe, fuerza y fibra luego lo recoge.

Lejos -dejando estanca
la gótica y fuerte conventual hueste-,
comenzará más franca
pugna vital y agreste
entre el destino y lo que liza geste.

Ahora ya el tesoro
dorado de las hojas en que estalla
noviembre, ocre y canoro,
el todo soto raya
en suelo acicular, dentada playa.

No es tanto bravo el Fuerte
como pajizo en ramas y albo en llanto.
Quedo anda. No despierte
tu paso algún quebranto
a convento, iglesia, nave, hoja o manto…


* Fuerte de San Francisco: Iglesia y convento situado en una colina sobre Guadalajara.



EL PALACIO DE MARÍA DIEGA DESMAISSIÈRES, MECENAS **
                                                            


No cual debieras luces
en sombra entre lengua estrecha en callejas,
ni el clamor de tus cruces
tampoco lo despejas
sino en angostas, prietas calles viejas.

Pero al cielo cortejas,
con románica, aguda espada en puntas,
el suelo al pronto alejas
y a infinito al que apuntas
capitel pizarroso habla en preguntas.

Amén de iglesia juntas
arte de residencia vizcondesa,
armas nobles adjuntas
de dama en negro ingresa
no en regla, sólo en caridad profesa.

Diega, casi francesa,
da Palacio y San Sebastián, ermita,
torre arquitecta tiesa,
su aguda aguja imita
eclecticismo que al Panteón cita.

** María Diega Desmaissières, condesa de la Vega del Pozo y constructora de varios lujosos edificios en la ciudad de Guadalajara.


MOZA ALZARÁ EN ALTURA
(Bajando la Calle Mayor de Guadalajara)


De Guadalajara, la Mayor calle
es estrecha, angosta, prieta y ceñida
cual virgen moza sílfide esculpida
sana en cinto, leve en grasa, justa en talle.

Quien de alto de rúa vista atalaye
moza alzará dos, tres o cuatro alturas
cuerpo esbelto, armoniosas estructuras,
piel clara y rosa, delgada en detalle.

Por su zona media más voluptuosa
en curvas, allí algunos senos abre
a plazuelas. Y camina sinuosa.

Del Ayuntamiento abajo, tortuosa,
tumbada pierna en sierras entreabre
y allí luz nevada o añil luz labre.

Os lo dice quien, tras curva bocacalle,
al pronto en ojo, oh cumbre, el claror le estalle.
A quien la ande… comba igual, luz, yo apalabre.



EN PUNTO A PICOS, ESTOS PUROS CLAVOS
(Fachada del Palacio del Infantado)



En punto a picos, estos puros clavos,
o puntas de diamantes engastadas
en trece ristras godas ya tardadas,
los hincó años del quince ya muy cabos.

La orfebre flor civil es de los bravos
lujos áulicos de España. Las gradas
de piedra en cuatro aristas afiladas,
¿qué mazo usó quién, y excavó sus cavos?

De columna en portón a uno y otro lado,
los velludos hércules descendieron
por remachar faena de los clavos,

que, solos, operarios no pudieron.
Tornaron luego a postes de Infantado
donde por siempre quedarán esclavos.


BORRASCA SOBRE EL PICO DEL ÁGUILA, AFUERAS DE GUADALAJARA*


Tanto picó -y tan fuerte- el afilado
Pico de Águila en tarde de borrasca
que izó sobre del cielo la hojarasca
de su aguijón y su pincho empuntado.

El cielo denso en nubes y aguzado
por reja hiriente que nimbo adamasca
rompe a llorar y húmedo se aborrasca
a gris, de azul, por colmillo acerado.

¿El pico? Una pirámide truncada.
La aguda punta en sobre dio el mensaje
de llover a la nube traspasada.

Suso de tromba rota al abordaje,
el águila -quizá-, del sol llegada,
planea luz hendida, en raudo viaje.


* Pico del Águila. Montaña afilada que hay a tres kilómetros de Guadalajara.


CRÓNICA DE ANTONIO HERRERA CASADO*
Cronista Provincial de Guadalajara


Si joyel diestro y docto en letra hubiera
que colectar de Alcarria en este instante,
pienso, hoy, joyel más sabio y más brillante
escritos son que casa Antonio Herrera.

Tanta pericia en peña es, castillera,
eclesial, claustral, histórica y andante
por rutas rayanas a la abundante
pesquisa hidalga, llana o comunera

que sólo en paisajes prosa supera.
Por saber sube, pinta y peregrina,
dibuja, mide, excava, oye e ilumina

hasta la última almena de una ruina,
de un palacio opulento o de una sierra,
estando con error en dulce guerra.


* Antonio Herrera Casado, cronista provincial de Guadalajara y Académico correspondiente de la Real Academia Española de la Historia.


SONETO DOBLE AL BOSQUE DE LA HUERCE Y SUS DANZANTES*


I


Mi alma peregrina viene hasta La Huerce,
paz busca, quietud quiere, ancla sosiego
en Sierra de Alto Rey a la que llego.
Calma a natura y unión a bosque ejerce.

Encinar, robledal, pinar y alerce
placidez dan, tinta en madera y espliego.
Tronco amo, copa bebo, raíz riego.
Sólo beldad de bosque me coerce,

de modo que, a poco que yo me esfuerce,
surtidor de este sueño en lanzas firme
quedara erguido en goce convertido.

Deseo a tu calmo sonar asirme,
pues noto más tu urbana aura ceñirme
que de ciudad agreste el turbio ruido.


II

Sigilo esmeralda pronto dulzaina
corta al bosque, y seco toque de palos
topan danzantes que izan a intervalos
espada en leño, talada a su vaina.

Cada uno, dos bastones desenvaina
cortos. Con fajín grana, negros halos
visten. El tambor brinda sus regalos
al bregar de tantas tozas. No amaina.

Saltan hacia lo alto tirando tajos
que troncos contrarios al punto paran,
luego en las honduras buscan atajos

si espadas adversarias les dejaran.
Uno a uno, a dos, cuatro… Ocho, altos y bajos,
al final, vencedores, se abrazaran.


* La Huerce: pueblo serrano de Guadalajara donde se conservan la naturaleza en pleno esplendor y danzas de paloteo quizá prehistóricas.



JUAN PABLO MAÑUECO MARTÍNEZ, periodista, escritor y poeta español, nacido en Madrid, el 21 de noviembre de 1954. A los tres meses de edad ya residía en Guadalajara, de donde es su familia materna, concretamente hasta los 7 años en la localidad de Tórtola de Henares. Posteriormente, su familia se trasladó a Carcagente (Valencia), donde concluyó sus estudios de Bachillerato en 1969, en el Colegio "San Antonio de Padua", de los Padres Franciscanos. En el curso 1970-1971 realizó sus estudios de Preuniversitario en Paterna (Valencia), en el Colegio de los Hermanos de la Salle, donde fue director de la Revista del Colegio, "Niebla". En octubre de 1971, inició la carrera de Filosofía y Letras en la Universidad de Valencia, a lo largo del curso 1971-1972. Tras un año en la Escuela de Sociología de Valencia el curso 1972-1973, que sería otra de sus aficiones y desarrollos profesionales andando el tiempo, retomó sus estudios de Letras en la Universidad de Valencia, en el curso 1973-1974, trasladándose a la Universidad de Madrid en el 1974-1975 y obteniendo el título de Licenciado en Filosofía y Letras, Sección de Literatura Hispánica, por la Universidad Complutense de Madrid en 1977. Ha ejercido la docencia de Lengua y Literatura castellanas, en diversos centros de Enseñanza Media de Guadalajara y de Madrid. Reside en Guadalajara, casado, tiene una hija. Como periodista, comenzó ejerciendo profesionalmente como redactor en "Guadalajara. Diario de la mañana" durante los años 1979 y 1980. Por su labor en este periódico, y más concretamente, por su reportaje "Castilla y León: 750 años de unidad", obtuvo la Mención de Honor en el Premio "Provincia de Guadalajara" de Periodismo, 1981, otorgado por la Diputación Provincial de Guadalajara.


Obra Publicada

1977 Claridad que emerge del agua (Premio "Provincia de Guadalajara" de Poesía)
1980 El nacionalismo: una última oportunidad para Castilla
1981 Cancionero y Romancero de la Alcarria, (Premio "Provincia de Guadalajara" de Poesía) Publicado en 1987
1982 Diez castellanos y Castilla. Libro de entrevistas sobre temática castellana a Miguel Delibes, Antonio Buero Vallejo, Jesús Torbado, Julio Valdeón Gómez, José Luis Martín, Ramón Tamames, Amando de Miguel, Francisco Fernández Ordóñez y Ramiro Cercós.
1997 Edición crítica y anotada de las "Novelas Ejemplares" de Miguel de Cervantes. Prólogo, edición actualizada y notas. Obra en doce volúmenes, uno para cada novela cervantina. 
2004 La Democracia real
2005 España 2004-2005. Artículos de periódico
2006 Sátiras de la España ZaPateril y PePeísta. Artículos de periódico
2006 Soberano don Nadie
2014 Guadalajara, te doy mi palabra Poesía
2014 Castilla, este canto es tu canto. Parte I. La historia, la literatura, el futuro
2014 Castilla, este canto es tu canto. Parte II. Las ciudades, los paisajes, los estilos


En obras colectivas

1982 Las raíces de un pueblo, en colaboración con Luis López Álvarez y Jesús Castañón. Poesía. ISBN 84-86132-01-0
1983 La emigración castellana, en colaboración con Isaac López y Andrés Vallejo. Ensayo sociológico. 
1984 Castilla, manifiesto para su superviviencia, textos de conferencias pronunciadas en el Centro Castellano-leonés de Tarragona, en colaboración con Gonzalo Martínez Díez, Ramón Carnicer, Ramiro Cercós y Demetrio Casado.
1997 Anuario estadístico del Corredor del Henares. Comunidad de Madrid y Provincia de Guadalajara. Información estadística municipal, relativa a todos los municipios del Corredor del Henares, editada anualmente entre los años 1997 y 2007. Once volúmenes.
2003 Guía de Turismo del Corredor del Henares y Provincia de Guadalajara. Rutas turísticas por Madrid y Guadalajara, editadas anualmente entre 2003 y 2007. 


Obra recogida en Antologías Poéticas

1981 Guadalajara en la Poesía (Diputación de Guadalajara)
1986 Cien poetas de Castilla-La Mancha (Patronato Municipal de Cultura de Guadalajara)


Premios

1975 Premio Internacional de Poesía Universitaria Colegio Mayor "Alfonso X el Sabio", de Madrid, por '"Tiempo".
1975 Premio Internacional de Relato Corto Universitario Colegio Mayor "Alfonso X el Sabio", de Madrid, por "La lluvia de estos días".
1976 Premio de Poesía "Alcarria Poética" del Semanario Nueva Alcarria, de Guadalajara, por "Náufrago".
1977 Premio Internacional de Poesía "Provincia de Guadalajara" por "Claridad que emerge del agua". Diputación Provincial de Guadalajara
1981 Premio Internacional de Poesía "Provincia de Guadalajara" por "Cancionero y Romancero de la Alcarria". Diputación Provincial de Guadalajara.
1981 Mención de Honor del Premio de Periodismo "Provincia de Guadalajara" por "Castilla y León: 750 años de unidad". Diputación Provincial de Guadalajara.