Carlos Barbarito



Carlos Barbarito
3 Poemas Inéditos




De: Paracelso y otros poemas (Inédito)


EL MUNDO LO PARIÓ...


El mundo lo parió,
un  desnudo sobre otro desnudo
vistos por azar y  al trasluz.
Lo parió un mar sumergido,
un mar bajo el mar,
allí, el temor a las tijeras,
al grito de los roedores,
a  la marca en el papel,
al cartón rasgado,
a cuanto al respirar se evapora.
Duerme  poco, despierta
y entreabre las cortinas,
se sopla las manos porque siempre tiene frío,
se deja  tocar en  la frente
por un fugaz hilo de luz, nada más que eso.
Si alguien lo llamara.
Si al menos hubiese un agua
para que sumergiera un dedo y luego toda la mano.



VESTIGIO, SUEÑO PUESTO DEL REVÉS...


Vestigio, sueño puesto del revés,
una sombra incierta
recortada sobre arena blanca.
Fue cosa, llena o hueca.
Fue órgano, fluencia, mecánica.
Le hablo, no responde.
O responde no el cuerpo sino su imagen,
no el ansia sino lo que del ansia
se separa del mundo y se ahoga.
De la vida huye el poco aire
que queda bajo las hojas,
nada lo retiene. Asfixia,
cordón que aprieta,
el cuerpo que pende,
inmóvil, sobre aislados vestigios de amor,
de mundo.



SUPE DE PRONTO QUE NO ERAS...


Supe de pronto que no eras
lo que creía, claridad matutina;
no eras esa luz, reflejo puro
en el vidrio. Se hizo entonces
incierta la vía entre los árboles,
giró sin sentido la brújula
y lo que fuera traje se volvió,
para siempre, despojo.
Y se hizo tarde. Y no hubo reposo.
Una tormenta impidió todo viaje,
toda fuga. Fue largo
lo que hasta allí era breve
y el trayecto consumió el fruto
antes de que madurase.
Papel seco, cáscara, la risa.
La voz, certeza rota, sumergida.
¿Qué hago aquí, todavía,
qué espero, la ventana abierta,
los ojos abiertos, los brazos extendidos?