ALIMENTOS Yo miraba a la gente cuando comÃa: Alzaba la mano con escasa ceremonia y con ella alzaba el brazo que iba hacia alguna parte del mundo, un mundo familiar habitual y plagado de sus propios olores, y después la llevaba hacia su boca. El mundo cambiaba y su boca también. Y luego continuaba la misma rutina. La boca, el brazo, el movimiento de los maxilares. El resultado de todo esto era un vientre hinchado, una boca y dos manos quietas. AsÃ, poco a poco, la gente se devoraba el mundo mientras el mundo se dejaba devo…
MarÃa Julia De Ruschi Diez Poemas De: Poemas de Nada escrito (hilos editora, 2011) EXORDIO La mañana llega como un pozo. Quiero creer en la belleza. ¿El mar, los árboles? La ciudad está rota. Con el viento sur se levanta un polvo sucio de la tierra reseca donde los chicos jugaron al fútbol hasta no dejar ni brizna de pasto. Los palos borrachos, enigmáticos, empiezan a lanzar el algodón de sus frutos ovales. Alguna vez escuché el silencio de esos frutos. Se recortan colgando de ramas negras contra el cielo temprano, tenue, …
Luis Manuel Pérez Boitel 7 Poemas De: Antes que la Noche Acabe. AntologÃa Personal (2005) PRELUDIOS I guardo entre mis dedos la percepción de estos dÃas y no quiero dejar atrás la infancia la hora en que decidimos por qué no somos la figurilla de agua frente al pórtico rostros confundidos vagan en la noche con este hedor que abrigan las calles navego todavÃa intento dejarlo todo a la intemperie en busca de esa filosa palabra que suele ser la libertad entre los dedos guardo la poca agua que nos nutre con ese sabor…
Beatriz Villacañas 20 Poemas De: La gravedad y la manzana, AntologÃa (2011) TRAYECTORIA En principio fue el grito, aunque el llanto se oyera adelantado. Grito, hecho emblema por siempre del contacto más virgen del aire en nuestra carne. TRABAJOS FORZOSOS He dibujado pájaros-manzana y he entrenado a mis huesos en las palabras nuevas. He moldeado a un dios entre mis manos y he sudado en la forja de las armas sagradas. Excavé la raÃz de la unidad perdida. Busqué un dÃa sin vÃspera y el cauce primigenio d…
MarÃa Teresa Bravo Bañón 15 Poemas De: Es Un Crimen Talar El A lmendro Florecido (2010) 1. ES UN CRIMEN TALAR EL ALMENDRO FLORECIDO Y se murió de espanto cuando amados violines volvÃan a brotarle por sus venas. A la memoria retornaban: que ya no habÃa remedio; ni placebo ¡Para vivir hay que vivir en carne viva¡. Huracán fueron sobre su cuerpo, desabrochada la conciencia , desnuda la expusieron. - sin un jirón de piel con qué cubrirse - Ni del corazón quedó rincón que no le fuera sacudido . Y tembló por…
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